Dédalo López, el personaje conductor que hace de unión en todos los relatos de Parque temático, es un peculiar enterrador ilustrado que reparte su vida entre el cementerio local —donde charla con los muertos—, la literatura y el cultivo de un pequeño huerto de sandías.
Este ultramundo está situado en Álgaba, una de las recurrentes ciudades literarias de María Antonia Velasco donde transcurre también su novela Ella y ninguna.
En Parque temático, además de asistir a los conciliábulos de las voces de sus vecinos muertos, veremos animales que hablan, presidiarios inocentes que buscan ordenar el Universo cometiendo un crimen, infidelidades consentidas, extravagantes apariciones marianas, casas de citas y demás desvaríos surrealistas apasionantes.