Estamos en 1840, en el Estados Unidos del salvaje Oeste y de los inmensos barcos de vapor que recorren el Mississippi. Jacob sueña con ser capitán de las imponentes embarcaciones, pero su vida se tuerce cuando todavía es muy joven y acaba en la cárcel. Ya libre, la sed de venganza le permite aguantar la pobreza y las desventuras que le persiguen como si fueran su sombra. Finalmente, decide volver a Hannibal, su ciudad natal, donde se encuentra la chica a la que ama, pero por donde también campa a sus anchas el hombre que lo encerró injustamente. La vuelta a casa será para Jacob un duelo contra su propio pasado.-