Los relatos recopilados en esta antología recorren los territorios de la fábula infantil, los de la soledad y la incomprensión adolescente y los de las aventuras más dispares que la literatura pone a nuestro alcance. Pero en todos ellos despuntan dos conceptos básicos: por un lado, la certeza de sus protagonistas de hallar un camino propio al margen de lo que las convenciones sociales y los falsos clichés quieran imponer, y, por otro, el mensaje de que, en el interior de las palabras, de las narraciones, de los relatos hay apasionantes mundos que vivir, muchas veces, más verdaderos que los que nos ofrece la realidad. Así podremos acompañar a la princesa de la flor de loto, a un caballero fiel a su tierra a pesar de la enfermedad que la asuela o compartir las lágrimas de aquellas que son abandonadas.