En Antíoco y Seleuco Agustín Moreto y Cabaña relata la historia de los herederos de Seleuco II de la dinastía Seléucida, rey de Siria entre 247 adC y 226 adC.
Antíoco y Seleuco detentaron primero uno y después otro el trono de Siria. El primero tuvo un reinado corto y murió envenenado por sus propios generales. Mientras que Antíoco reinó con el nombre de Antíoco III Megas (el Grande).