Descubrir el amor, vivir la alegría y la nostalgia, vagar libremente entre la fantasía y la realidad son cosas que trazan el perfil de la adolescencia. De esa materia está hecho este libro que, también, nos habla del sentido de la justicia o del dolor, del mundo de los jóvenes dibujado con luces y sombras.
Cuentos juveniles -pero para todas las edades-, los que conforman estos Castillos de arena tienen el encanto y la fascinación de lo frágil y único, de lo bello y perdurable: arena que marca una edad y un territorio de ilusiones.