Escrito antes de la victoria de Trump, o del Brexit, señala los síntomas de una crisis del orden liberal, que podría cuajar en alternativas peligrosas.
El liberalismo ha fracasado... porque ha triunfado.
Por eso, la solución a los males de nuestro tiempo no está en "más liberalismo", aunque tampoco en una vuelta nostálgica al pasado. El New York Times o The Economist han puesto a Deneen en el centro de este debate porque dibuja en trazos certeros los fundamentos de la visión del hombre y de la sociedad propia de la filosofía liberal, su individualismo y su estatismo. Se abordan los problemas de la democracia liberal, pero también la crisis de las humanidades, el vigente paradigma tecnocrático y su impacto en la ecología, los retos de una economía injusta, etc., y algunas pautas para lograr un liberalismo genuino.