La Magdalena de Roma es una obra dramática escrita por el dramaturgo español del Siglo de Oro, Juan Bautista Diamante. Diamante es conocido por su habilidad para explorar temas complejos y profundos en sus obras, utilizando la dramaturgia para ilustrar y cuestionar diversos aspectos de la sociedad y la moral.
En La Magdalena de Roma, Diamante elige dramatizar un episodio específico relacionado con Santo Domingo de Guzmán, un religioso prominente en la historia de la Iglesia Católica, famoso por ser el fundador de la Orden de los Predicadores, más conocidos como dominicos.
El episodio en cuestión trata de la conversión de una mujer llamada Catalina. En la trama de la obra, Santo Domingo intenta guiar a Catalina hacia la fe y la virtud, proporcionando un contexto rico para una exploración de temas como la redención, el arrepentimiento y la gracia divina.
La elección de este episodio específico permite a Diamante explorar no sólo la figura de Santo Domingo y sus esfuerzos evangelizadores, sino también el personaje de Catalina, su lucha interna y su eventual transformación. Este enfoque en la conversión y la redención es común en la literatura del Siglo de Oro, reflejando las preocupaciones morales y espirituales de la época.
En cuanto a la elección del título, La Magdalena de Roma, es probable que haga referencia a María Magdalena, una figura bíblica conocida por su propia conversión y arrepentimiento, proporcionando un paralelismo con la historia de Catalina.