Una copia del Código de Hammurabi, esculpida en un bloque cilíndrico de piedra de diorita negra, fue hallado casualmente en Susa (Irak) por un grupo de arqueólogos franceses al mando de Jacques de Morgan, en diciembre de 1901.
El bloque, encontrado roto en tres pedazos, fue llevado a Paris donde fue restaurado y donde el padre Jean-Vincent Scheil tradujo el texto al francés.Postyeriormente, el código se instaló en el Museo del Louvre en parís, donde se encuentra en la actualidad.