Liv Løkke comienza a tener pesadillas cuando el incendio y su pasado irrumpen en su presente. Anne Larsen la contacta. La periodista ha visitado a su hermano y le genera tanta curiosidad saber qué quería de él, que acepta encontrarse con ella en un café de Randers, de mala gana. Pero las afirmaciones de la periodista la enfurecen y se marcha del café muy enojada. Pero al leer un periódico que el hijo de Johan Boje presenció el asesinato, va a la casa del amante de su madre para encontrarse con el niño, frente al memorial de su padre.-