¿Recuerdas lo que hiciste ayer? Una mirada, un gesto, una palabra… La memoria del pasado es perfecta, no olvida. El mal no descansa y el monstruo de la venganza ha regresado para recordarte que cada acto tiene una consecuencia. Sólo hay una escapatoria: enfrentarte a él. Una persona honesta y de principios se verá obligada a dinamitar los pilares de sus creencias para llevar a cabo una vil maniobra. Empujado por una traición, luchará por hacer justicia. Una justicia que el sistema no fue capaz de dictar.