El narrador de este libro presenta de forma alternativa la voz de un pastor de vacas y el diálogo entre los miembros de una familia de Lisboa que se pierde por la niebla durante tres días en el monte. Eso le da juego a Neves para ensalzar la cultura milenaria de la gente del campo y recordar cierto embrutecimiento en la vida
de ciudad.
El espíritu de las vacas es un libro actual, escrito desde una voz que busca un lugar de descanso en un mundo lleno de ruido. Con un lenguaje muy potente, el narrador es capaz de crear una especie de laguna vacía con el desconocimiento que los miembros de la familia tienen sobre sí mismos y lo que les rodea.
¿Qué queremos decir cuando hablamos de naturaleza? La respuesta la podemos encontrar aquí, recordando el ritmo vital de aquellos lugares donde el ser humano no tiene el poder.
Trás-os-montes vuelve a ser el escenario de un gran libro como ya lo fue para Miguel Torga o Julio Llamazares.