Pablo Luna, un joven esquivo a las relaciones humanas, vive en el medio del monte en compañía de su guitarra. Gracias al capataz de una estancia, consigue trabajar allí durante una temporada. Es entonces cuando conoce a Soledad Montiel, la hija del estanciero don Brígido, quien lo denigra por considerarlo un gaucho matrero. Sin embargo, Soledad no puede evitar compararlo con Manduca Pintos, el brasileño que la pretende; Pablo la seduce sin acecharla, y este contraste hace brotar en ella un amor imposible de aplacar.Con «Tradición del pago» como subtítulo y enteramente ficcional, «Soledad» (1894) es considerada la producción más sobresaliente de Acevedo Díaz y un modelo para gran parte de la novelística hispanoamericana.-